lunes, 19 de diciembre de 2016

Hijos del 2001


15 años pasaron de la “crisis del 2001”, es hora de una reflexión obligada, ¿estamos al borde de otra crisis?
- Crónica de esos días -

Cuando era un joven adolescente y vislumbraba la crisis emergente que se avecinaba sobre nosotros (allá por el 2001), un profesor muy amablemente me dijo “no te preocupes, siempre hay crisis y siempre salimos”, lo dijo casi naturalizado, como si fuera normal entrar en crisis sociales cada 10 años, a mi no me pareció muy normal, pero por esos días, era común que la gente diga esas cosas.
Con el correr de los días todo se fue agravando, y puntualmente ese 19/12/2001 tuve que concurrir al colegio, en ese camino pude “entender” mas de cerca eso que pasaba, y la “crisis” no era solo economica, era el gran quiebre cultural que estaba ocurriendo ese mismo día.
Sobre las cenizas del otrora célebre neoliberalismo, la crisis de 2001 funcionaría como escenario de legitimación para el discurso de la refundación, en un contexto en el que la desocupación rondaba el 20%, la caída del PBI alcanzaba el 4,4%, la pobreza alcanzaba al 40% y la sociedad incriminaba a la clase dirigente con el “que se vayan todos”.
La socióloga Naomi Klein adoptó el concepto de “doctrina del shock” para definir un modus operandi del capitalismo moderno que requiere de catástrofes para avanzar. En términos operativos, la doctrina funciona de la siguiente forma: se produce un desastre -que puede ser un golpe de estado, un ataque terrorista, un colapso del mercado, una guerra o un tsunami-que lleva a la población de un país a un estado de shock colectivo que, asimismo, funciona como la antesala para la implementación de drásticas medidas económicas].   Klein edifica su argumento en base a los postulados de Milton Friedman, uno de los principales referentes de la escuela neoliberal. Friedman va a establecer que sólo una crisis -real o percibida- da lugar a un cambio verdadero. Cuando esas crisis tiene lugar están dadas las para desarrollar políticas alternativas a las existentes, haciendo que lo políticamente imposible se vuelva políticamente inevitable. En estas condiciones –es decir, a fuerza de shocks orientados a sembrar el pánico.


Entonces, ¿que nos paso? (¿que cambió hoy?)

Paso que todo cambio! los saqueos, las muertes, el que se vayan todos, la criis institucional, y el pueblo saliendo a la calle, cambio de una vez y apra siempre la perspectiva de las masas respecto a la participación política. Cambió el "en eso no me meto" a "hay que organizarnos", cambió el "que se vayan todos" por "tenemos que participar", cambio de una vez y para siempre.

La realidad superó a la ficción, los que estábamos cubiertos por la vergüenza de ser pobres, ninguneados por el olvido y la desesperanza, nos cansamos y salimos a reclamar lo justo, lo que por derecho nos pertenece. somos el pueblo que "demanda"

Legiones de jóvenes, nos volcamos a la participación política, por medios partidarios o por 3era via. Otros actores sociales comenzaron a accionar concretamente en la transformación de la realidad, sea por via de "piquetes", "cacerolazos", "marchas y contramarchas" o en la nacientes Redes sociales años despues. Nadie se queda quieto, ni de brazos cruzados.

Cambío que entendimos que lejos de quedarnos inmoviles y pasivos, la única manera de que todos salgamos adelante es que "participemos", "opinemos" y "transformemos". De otra manera, ya vimos los resultados, ser apolíticos no resulto, y para peor termino en el desastre del 19 y 20.



Somos los hijos del 2001, los que hoy tomamos las riendas de la participación y construimos la realidad que queremos para nuestros hijos del futuro, somos los militantes sociales, los militantes políticos, los obreros de a pie, los que no llegamos a fin de mes, los que seguimos creyendo en utopías, los que seguimos creyendo que no hay que irse, los que seguimos luchando, los que no lloramos porque ahora crecimos, los que volvimos y ahora somos millones.

PD: Les dejo un video con imagenes de esos días.

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